El senador nacional Gerardo Morales interpretó que el pase a retiro del teniente general César Milani “es un signo desesperado del kirchnerismo para eludir responsabilidades políticas por haber sostenido a un militar implicado en violaciones a los derechos humanos”.
Y consideró que es parte de una estrategia de “limpieza de imagen del pretendido proyecto nacional y popular” con vistas a la próxima contienda electoral.
El legislador radical había cuestionado severamente al renunciado Jefe del Ejército desde que el bloque UCR rechazó su ascenso en 2010.
Al opinar sobre la cuestión Morales reclamó que “se desmonte el sistema de inteligencia que Milani comandó y que fue destinado a perseguir a opositores”, así como sostuvo que “el Ejército Argentino debe ser una fuerza para la democracia y su próximo Jefe debe reunir las condiciones que exige el sistema democrático”.